sábado, 28 de febrero de 2009

Loco en Pensacola

Este es el asesino.

El día 27 de febrero, Danny Baker, un hombre desquiciado, de 60 años, xenofóbico, disparó a la casa que habitaban 12 estudiantes -chilenos en su mayoría-, 2 de ellos fallecieron en el lugar y 5 quedaron gravemente heridos, quienes fueron derivados a un hospital cercano, uno de ellos se encargó de avisar a sus padres de lo ocurrido. El cónsul chileno se encargó de trasladar a los familiares de los malogrados y jóvenes compatriotas.

Vimos en los noticiarios a los padres y hermanos de estos chicos llorar desconsoladamente ante tan increíble desgracia. Nadie se explicaba por qué motivo pudo ocurrir esto, que mente podría haber atentado -a sangre fría- contra un grupo de jóvenes que compartía una reunión sánamente.


Será que estamos ante una conducta ya instalada en los seres humanos, donde el valor de la vida no cuenta, donde la tolerancia ya no existe. De mucho otros actos horribles hemos escuchado: la desaparición de la pequeña Madelaine Mc Cann, la tortuosa vida que tuvo una niña en Alemania, miles de violaciones, atentados y homicidios se transforman en cotidianos acontecimientos en todo el mundo.

Incomprensibles, indignantes, dolorosas y repudiables situaciones que tenemos que ver, sin ninguna posibilidad de hacer algo, con las manos atadas. Nuestros niños, a los que queremos proteger y que tengan una infancia feliz, están tan desprotegidos al salir de nuestros hogares que queda confiar en algún ángel que los proteja, porque no se salva ni siquiera la policía, la que también se ve envuelta en actos vandálicos y corruptos.

Personalmente, quisiera confiar en que sólo los valores que inculcamos en nuestros hijos, puedan ser asimilados por ellos, para que al enterarse de tanta violencia no crean que es normal, que no crean que los conflictos se resuelven de esa forma. Son tantas las fuentes que promueven la intolerancia, que se hace complejo explicarles que esa no es la mejor manera de actuar, que no es mejor el que agrede sin compasión, que sus derechos terminan donde empiezan los del otro, que la vida es valiosa, que la amistad es necesaria, que el amor arregla cualquier enfrentamiento, que la lealtad es compensada con reconocimiento, que crecemos como seres humanos cuando logramos hacer entender al agresor que su comportamiento no contribuye a su desarrollo como persona, ¿es tan difícil?

Estas mentes enfermas ¿deberán recibir algún castigo ejemplar?, ser encerrados por años ¿resolverá el problema?, llenar las cárceles de desquiciados ¿será una solución?. ¿Será posible recuperar a estos seres insanos para que no sean un peligro inminente?. Cuesta pensar que existen personas que conoces podrían ser asesinos, que podría ser un pertubado y que llegaría a matarte sin miramientos.

Una vez, conversando con mi hijo de 22 años, analizamos qué habría que hacer para resolver el problema de la delincuencia, sobre todo cuando son niños o adolescentes los protagonistas de actos tan deleznables, y me sorprendió cuando me dijo que para él sólo la educación, la buena educación que los padres estamos obligados a entregar a nuestros hijos, es la única solución.

Muchos años tendremos que esperar, para que esta nueva generación aplique las enseñanzas que algunos padres hemos inculcado en ellos. Muchos años pasarán antes de que los gobiernos entiendan que deben crear políticas nuevas, para evitar que los niños en riesgo social se tranformen en delincuentes, que deben ser atendidos en forma especial, en conjunto con sus familias, las que muchas veces son disfuncionales e incluso, los padres también son personas violentas, transgresoras y poco preocupadas por este tema.

viernes, 27 de febrero de 2009

Recuerdos de una vida


Voy en un ratito más al departamento que nos albergó durante más de 2 años, a ese mismo que alejó a Ñamku de mi vida, ese mismo que permitió que ya no viviéramos más juntos y que en vez de evolucionar como pareja involucionamos a novios.

Voy con mis niños para que recuerden ese tiempo y para ver si están algunos de los amigos que hicieron allí. Hace tiempo que no voy sola, sin Ñamku, me imagino que lo veré con otros ojos. Tengo algo de nostalgia, en ese lugar, pequeñito, pero acogedor, logramos vivir en familia todo ese tiempo, con altos y bajos, como toda pareja, sobretodo con niños que requieren más atención, más espacio, siempre tener que darles de comer, mandarles almuerzo y colación al colegio todos los días, lavar cerros de ropa... todo esto desgasta, aburre y gatilla discusiones que se enfrascan en eternos reproches, que van deteriorando cualquier relación, no sólo de pareja, también interfiere en la que se crea con los niños.

Voy camino a mirar mi pasado reciente, mi vida anterior feliz con un hombre aparentemente simple, aparentemente alegre, pero que cambió con la agobiante realidad de nuestra compleja vida. Esta persona se vio sepultada por las cuentas, para él nuestros problemas son sólo económicos, yo no comparto esa visión, pero la respeto, me costó entenderlo pero lo hice.

jueves, 26 de febrero de 2009

El cuestionario de Noelia

Hoy estuve en la casa virtual de Noelia, a quien "Soy una pobre pensionista" http://unapobrepensionista.blogspot.com/ le dejó este cuestionario que contestaré gustosa, se los dejo por si les apetece contestar:
1. ¿Cómo es tu despertar por la mañana?
- A veces muy contenta, dependiendo de cómo haya dormido y cómo se venga el día, otras veces no quisiera despertar nunca más
2. Estación favorita del año?
- Primavera y verano, en otoño e invierno me muero.
3. ¿En qué ocupas tu tiempo?
- En escribir en el blog, leer, ver televisión, ir a la casa de mi hermana a compartir un momento agradable.
4. ¿Cuál es tu comida preferia?
- El pastel de papas, el pastel de choclo, las humitas, las ensaladas
5. ¿Cuál es tu color preferido?
- Al igual que Noelia, el negro. Mi ropero está repleto de ropa negra.
6. ¿Qué día de la semana es mejor para tí?
- El viernes, porque el sábado se puede dormir un poco más.
7. ¿Qué lugar te gustaría visitar alguna vez?
- Europa, enterita, sobre todo España y todas sus hermosas ciudades. También Nueva York, China, Hong Kong y muchos otros que sería largo de detallar.
8. ¿A qué temes?
- A que le pase algo a algún hijo, a mi madre, a mi hermana, a mi hermano, a algún ser muy querido, a volver a equivocarme, a hacer sufrir a alguien querido.
9. ¿Qué es para tí un blog?
- Mi pañuelo de lágrimas, mi depósito de tristezas, mi almacén de buenos amigos.
10. ¿Te cuesta perdonar?
- No, nunca me han dañado tanto como para no perdonar, todos podemos equivocarnos alguna vez.
11. ¿Qué extrañas?
- A mi papá, poder salir a algún lugar lejos de Santiago sola, despertar y no tener ningún problema grave.
12. ¿Cómo vives la Navidad?
- Con bastante indiferencia, sólo me preocupo de que los niños, cuando son muy chicos,
reciban algún regalito. Lo tomo como un día feriado, para descansar y estar con la familia.
13. ¿Quiénes forman mi mejor concierto?
- Mis hijos, mi familia, mis amigas y amigos, Silvio Rodríguez, hace poco Ismael Serrano, Dido, Madonna, Jarabe de Palo, Chambao y tantos otros.
Contesten con sinceridad, le dejo un abrazo,
Mona

miércoles, 25 de febrero de 2009

Cuando el pasado llama a tu Facebook

Hoy recibí una sorpresa muy grata, en mi gmail había un mesaje que decía que alguien de mi pasado quería ser mi amigo en Facebook. No podía creer lo que mis ojos veían. Fue un profesor que tuve en el instituto donde estudié traducción y él me hacía clases de inglés. Lo recuerdo muy alto, muy varonil, con barba y bigote. Tenía una voz que nos tenía a todas enamoradas. Como toda adolescente me enamoré de él, era mi amor platónico.

Fue platónico hasta que un día que no fui en mi auto a clases, él me interceptó a la salida del instituto y me ofreció llevarme o encaminarme hacia mi casa. Esa invitación a subir a su auto fue lo que me hizo ver que no era un amor platónico, que podía llegar a tener algo con mi ídolo, eso lo pensé mientras él manejaba. Yo lo miraba embobada, era tan guapo, tan sexy para mis ojos ingénuos.

Después de unos días de ocurrido este encuentro, a propósito fui sin auto para ver si se volvía a producir la invitación, esta vez me hizo la invitación, pero no a mi casa, sino a la suya. No podía creer la suerte que tenía, iba a la casa de mi profesor, ese señor alto y guapo que cuando me hacía clases yo sólo babeaba. Llegamos a su departamento, en el centro de Santiago, subimos a un cuarto piso, no recuerdo bien, me hizo pasar, me ofreció una gaseosa y nos sentamos a conversar. Era un departamento pequeño, que tenía sólo una cocina, un baño y un gran dormitorio con una cama de dos plazas.

Sólo quería que me besara, era mi fantasía más soñada. Me besó, no solamente la boca, me besó entera, yo lo besé entero también. Luego me desnudó e hicimos el amor, yo no cabía en mi de dicha, era mi sueño cumplido. Todos estos recuerdos vinieron a mi mente cuando vi su nombre en Facebook, se me aceleró el corazón, sentí las mismas mariposas en el estómago que sentía cuando se dirigía a mi en clases o cuando me abría la puerta de su auto para que subiera. Fueron dos veces que estuvimos juntos.

Ayer hablamos por el chat, está más grande, más frentoncito, como le comenté, sigue haciendo clases en una universidad, está planamente casado hace 20 años, tiene 3 hijos que adora y sigue siendo igual, como lo recuerdo. Quiere que nos juntemos a conversar un cafecito. No sé si ir. Amo a mi pareja, no quiero serle infiel, pero no sé qué va a pasar cuando lo vea, a lo mejor nos tomamos sólo el café y conversamos o talvez nos abracemos, nos besemos y vayamos a otro lugar.

Por ahora nos comunicamos por el chat y es muy interesante saber qué sentía él hace tantos años y saber además que el me buscó. Para él fue una gran sorpresa saber todo lo que me provocaba en esos años. Tampoco se acordaba por qué no seguimos, si nuestros encuentros eran hermosos, tiernos y muy apasionados. Después de que estuve con él, empecé un pololeo con mi mejor amigo, tan amigo fue que quedé embarazada y tuve que casarme con mi amigo.

Qué lindos recuerdos tengo de esa época, cuando tenía hermosos 18 años, cuando vivía mis primeros amores, mis primeras desiluciones

viernes, 20 de febrero de 2009

Temblores y Chaitén

En mayo del año pasado, el volcán Chaitén hizo erupción, fue tan terrible que hubo que evacuar dos localidades (Chaitén y Futaleufú, al sur hermoso de Chile) hacia Puerto Montt, los habitantes de estos pueblos estaban desolados, y no es para menos, esta erupción tuvo características de catástrofe, se elevó sobre el domo una inmensa nube tóxica quiroplástica que llegó hasta Argentina, con el terrible temor de que precipitara y bajara a más de 400 kilómetros por hora, con su carga tóxica y candente (más de 1.000 grados celsius). Con ese escenario, como si no fuera suficiente, el río que cruzaba Chaitén se salió de su curso, inundando las casa más cercanas, convirtiéndolo practicamente en un pueblo fantasma, sólo quedaron algunos policías, el locutor de la radio local y la inmensa cantidad de animales errantes.
Pasaron varios meses y las personas, albergadas en Puerto Montt, comenzaron a necesitar volver a sus casas, pocas quedaban, la erupción cubrió los pueblos de cenizas, más de 50 cms., que mataron toda vida vegetal existente y mataron miles de animales que no tenían de qué alimentarse, incluso estas personas lloraban por sus mascotas, fue desgarrador verlos por televisión.

El gobierno los indemnizó con un monto mensual, para que pudieran ubicarse, arrendar algún lugar, mandar a los niños al colegio, pero el gran problema que había era que la mayoría de los albergados sólo sabían trabajar la tierra o mantener una cantidad de animales para poder subsistir.

Luego de 9 meses, en los que varios habitantes volvieron poco a poco al pueblo desolado, contra las indicaciones gubernamentales, comenzaron a sentirse miles de temblores, en un principio suaves, pero al avanzar los días muchísimo más fuertes, luego de eso volvió a hacer erupción, esta vez creando un nuevo domo (cráter) por un costado del monte, con el peligro inminente de dejar caer su furia con más energía que la anterior.

Nuevamente, el gobierno les solicitó irse del lugar, pues el peligro de que quede sepultado es claro, encontrándose esta vez con más reticencia, incluso el alcalde estaba en contra de dejarlo. Constitucionalmente, no pueden obligar a ningún ciudadano a dejar su hogar, en eso se han basado los argumentos de los rebeldes.

Cuesta pensar en vivir en un lugar cuya seguridad pende de una nueva explosión, cuesta aceptar dejar todo lo que has juntado en toda una vida. Ellos argumentan además que teniendo en cuenta que el Chaitén no hacía erupción hacía 3.000, era poco probable que volviera a rugir pronto, lo que no tomaron en cuenta, es que este volcán desde que empezó su actividad, no ha dejado de seguir emanando gases y se mantiene una gran nube sobre su cima.

Me resta decir, que lamento enormemente lo sucedido, es un problema difícil de solucionar, pero quedarse ahí es naturalmente, la peor forma de hacerlo. Les deseo toda la suerte del mundo y que sus mentes logren entender el enorme riesgo que implica desentender las sugerencias de los expertos.

lunes, 16 de febrero de 2009

Caperucita - Ismael Serrano

Les dejo la letra de esta canción hermosa de Ismael Serrano. No hace mucho escucho a este fantástico artista, supongo que muchos de mis amigos españoles ya la conocen, para mi es casi biográfico... Lamentablemente, no pude encontrarla para poder escucharla con ustedes... Rectifico... Mi querida amiga Difistinto me ha mandado el link, muchas gracias... a escuchar



Caperucita sólo tiene dieciséis
primaveras sin flores, papá le dice: "Ven.
Caperucita eres joven y tienes que aprender
a ocuparte de la casa, que serás una mujer.

Para que seas buena esposa
y no envejezcas sola,
en la cama y la cocina has de saber
alegrar a tu marido y cuidar a cada hijo,
que te atrapa tu destino,
que has de ser madre y esposa".
Y la pobre Caperucita llora.
"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir, no quiero despertar,
Quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad".

Una fría tarde Caperucita iba
a casa de su abuela a llevarle comida,
cuando se encontró con un lobo feroz.
"Dime dónde vas niña, que te acompaño yo".

La muchacha se supo perdida.
Gritaba Caperucita
mientras la devoraba el lobo.
Bajo la falda del vestido
estallaron los dormidos
sueños que en la noche
la mantenían viva. Pobre Caperucita.
"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
dormir, no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad".
Una gris mañana Caperucita se casó,
vestida de blanco, bella como una flor.
Su marido, muy elegante, otro lobo feroz,
y su padre orgulloso lloraba de emoción.

Ahora cada noche el lobo la devora,
clava sus dientes, y llora
Caperucita mientras espera a que un aullido
le diga que el dormido animal despertó.

Después descansa tranquilo el malvado lobo feroz.
La cara de Caperucita alumbra una sonrisa
mientras mece una cuna. En ella está una niña,
quizás futura oveja para un lobo feroz,
a no ser que afortunada la rescate tu amor.
Caperucita la arrulla contra el pecho
y un murmullo lento y lleno
de esperanza y vida,
canta Caperucita.

"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir, no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad.

Quiero volar".

domingo, 15 de febrero de 2009

Una esperanza

En las mañanas que miro a través de mi ventana,

con la esperanza de dirigir mi pupila hacia esos desiertos.

De ver esos desiertos que habitan en el asfalto,

De disfrutar esos desiertos que simulan ser frondosos.

En esos desiertos he hundido mi mano confiada,

a cambio he recibido arena ardiente, quemante,

Con temor vuelvo mis ojos errantes

hacia refugios inventados.

Descubro unas manos lejanas,

que se acercan cálidas, pero no ardientes,

me envuelven en un manto tibio y sedoso,

del que quiero aferrarme eternamente.

Me tiran por los pies otras frías y húmedas,

ruego a esa mano cálida me sostenga,

no me deje partir, me salve,

escudriño en mi alma la más suave promesa realizada,

los oídos sordos de esa mano fría no entienden,

con el afán de quedarme en la tibieza,

se confunden los pedidos,

la mano tibia me suelta y la fría me subyuga.

Saco una voz distorsionada, quemante,

pretendo que el calor me rescate,

los rugidos escalofriantes inundan el espacio,

mi mano cálida no me escucha,

sigo gritando hasta ensordecer el frío

hasta incendiar el témpano.

Por fin, me jala fuertemente,

la espezanza se viene a nuestro lecho,

por fin, la esperanza se nos queda.

sábado, 14 de febrero de 2009

Lágrimas

Lágrimas, lágrimas y más lágrimas...
Hoy aparecen sin ser invitadas,
hoy inundan mis ojos,
sin permitirme ver
más que imágenes borrosas.

Lágrimas que caen sin poder ser contenidas
sollozos profundos que ahogan,
incontrolables brotan de mis ojos a borbotones,
inexplicables, caen y caen,
estropeando lo que mojan.
Lágrimas irreverentes,
no dejan de caer,
la angustia también toma palco,
esa que sabes por qué está,
pero que te rehusas a vivir.
Preocupo a quienes me sorprenden,
aunque en secreto pretendo simular,
mis ojos me delatan, se hinchan,
rojos testigos de penas profundas.

viernes, 13 de febrero de 2009

Comprensión

Muchas veces nuestro inconsciente nos hace malas jugadas. Pensamos que sí entendemos lo que le pasa al otro, pero muy dentro nuestro sabemos que en realidad lo que nos dice o lo que le sucege no es tan cierto y que hay mucho de manipulación en ese comportamiento. Sobre todo cuando hay alguna enfermedad de por medio.

Las personas, en un principio, actúan con preocupación y desvelo, pero existen algunos males que, en definiva, no se curan con una píldora y con varios días de reposo. Males del estado de ánimo, que según el mal, hacen que a veces nos sintamos muy activos y otros, simplemente, quisiéramos no existir.

Pongamos el ejemplo de una persona operada, los primeros días son horribles, el dolor de la herida hace que la persona esté irritable y quejumbroso, y se entiende por la magnitud de la invasión. Pero en nuestros días, los médicos sugieren que los operados comiencen de inmediato a movilizarse, obviamente con cautela y de a poco. Puede haber fiebre en algunos casos, donde lógicamente, nuestro enfermo estará tumbado en la cama sin querer saber de nada, sin apetito, sin ánimo. Pasados algunos días la fiebre cede y da paso a un mejor estado general, más optimismo, más apetito y más ganas de levantarse, lo que se irá incrementando a medida que vaya pasando el dolor.

En una enfermedad psiquiátrica, no existen motivos ambientales para los cambios en el estado de ánimo, algunos días podemos estar muy alegres, con ganas de hacer muchas cosas, diríamos hiperactivos (en psiquiatría: Hipomanía). En cambio otros, como hoy, en los que no dan ganas de hacer nada, ni siquiera de hablar, de comer, de asearnos. No importa la cantidad de horas en las que estés en ese estado, es la etapa depresiva del mal.
Entiendo que es difícil de llevar y, entiendo que se sienta como manipulación, pero es efectivo, es como si todo lo que te rodea no tuviera sentido, como si la vida misma estuviera castigándote por existir. Para alguien que nunca lo ha vivido, se torna insoportable e inentendible, quisiéran ayudarte pero no existe en el mundo nada que pueda hacerte cambiar ese estado, salvo algunos medicamentos que aporta un poco de cordura.
En este caso, lo único que sirve de veras, es la comprensión, el estar al lado sin decir palabras, acercarte un pañuelo para que no termine empapada la almohada y las sábanas, llevarte un vaso de agua o simplemente acariciarte el cabello. Pésimo es enfadarte o recriminar a esta persona porque no lo tomas en cuenta o porque sienten que no quiren que estés con ellos.
El amor en estos casos es vital, si realmente te quieren sabran guardar silencio cuando sea necesario, darte una palabra de aliento, simplemente estar.

jueves, 12 de febrero de 2009

Un paseo por Santa María de Manquehue

Vivo hace 45 años en Santiago de Chile y siendo franca, sólo conocía el sector que podríamos llamar plano de la ciudad. Hace unas semanas, estando yo en un estado miserable de ánimo, mi amor me convenció y me sacó a dar una vuelta por la precordillera. Anduvimos por un centro comercial muy exclusivo, donde bebimos una gaseosa, comimos unos pastelitos y luego, pensando que ya partíamos a casa, me subió a un bus que dio una vuelta con muchos recovecos que nos llevó a un camino donde se ve toda, toda la ciudad.

Santa María de Manquehue, en el mismísimo cerro Manquehue que, hasta donde yo sabía, no estaba habitado ni tenía caminos. La vista era sobrecogedora, hasta di un gritito de sorpresa al ver tan hermosa a mi ciudad. Siempre me ha parecido bella, pero verla desde la punta de un cerro, cambia la cosa. Estaba oscureciendo, empezaban a encenderse las luces y la maravilla no terminaba aún, el bus dio otra vueltecita y se veía el otro lado de Santiago, más hermoso aún.


La opulencia de las casas del sector me impresionó, verdaderas mansiones con prados magníficos, cinco autos por casa y unos metros más allá todo lo opuesto, miserables casuchas con personas cuya dignidad dista mucho de ser tal. Los contrastes de esta ciudad son quizás lo único que no me gusta, cómo tanto para algunos y nada para otros. Quisiera imaginar esta ciudad más justa, que por lo menos chorreara algo para los que tienen menos oportunidades y recursos. Es un sueño de muchos, creo yo. La crisis no se notó en este paseo sorprendente. La conclusión que pude sacar de este paseo que duró casi dos horas, es que debemos hacer algo para lograr la tan ansiada equidad.

Les dejo estas fotos a mis amigos de otras latitudes y a mis amigos chilenos que no han conocido aún la magnificencia de nuestra capital.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Gracias

Como escribí hace algunos posts, mi hombre fue operado el lunes, pues bien, llegó el momento del alta médica y resolver el problema del traslado. Tomemos en cuenta que no tengo vehículo y el de mi hermana no estaba disponible, pues ella está tomando sus merecidas vacaciones, por lo que este simple suceso se transformó en una odisea.

Pensaba y pensaba qué hacer para poder trasladar a este hombre alto y delgado de una manera cómoda y segura. En ese pensar y pensar, se me ocurrió llamar a mi otro salvador de situaciones extremas, mi hermano, con tan mala suerte que él también estaba haciendo uso de su merecido descanso en una ciudad muy lejana de Santiago. De todos modos lo llamé, para asegurarme de que efectivamente estaba lejos, con tan buena suerte que me ofreció una solución maravillosa.


Mi hermano tiene una empresa que se dedica a la reparación de maquinarias de la minería, por lo que la crisis, en vez de perjudicarlo lo llenó de trabajo, pues los empresarios mineros suspendieron sus compras de maquinaria nueva y decidieron repararlas, entonces por fortuna le ha llegado más trabajo del que puede cubrir, teniendo largas listas de espera para reparar las enormes máquinas del rubro. Aclarado este tema, puedo definir a mi hermano como un hombre muy trabajador, que tiene lo que tiene por que se ha roto el lomo trabajando, tiene un buen pasar y las personas a quienes deja cuidando sus intereses, están tan agradecidas de su bondad que hacen todo lo posible para que no tenga preocupaciones durante su descanso. Es el caso, que me contactó con su gerente general, quien me llamó muy amablemente, preguntándome qué necesitaba exactamente para poder dármelo. Primero pensé en que me prestaran un vehículo, ir yo a buscarlo y luego de hacer el traslado, volver a dejarlo.


No alcancé a pedírselo, cuando me dijo que mejor, para evitar que tuviera que ir tan lejos a retirar un vehículo, me facilitaba a un chofer de la empresa, a mi disposición por todo el tiempo que necesitara. Fue así, que a los minutos de haber cortado con él, yo muy agradecida por lo demás, me llama el chofer, ofreciéndome todo tipo de facilidades y consultándome la hora y el lugar donde debía dirigirse.


La verdad es que no tenía muy clara la hora en que el doctor iría a examinar a mi amor y tampoco la hora del alta, así es que estimamos una hora durante la mañana de hoy. Muy puntualmente me llamó y me dijo que ya estaba estacionado esperándome en la clínica. A todo esto, el doctor no daba señas de llegar, así es que le dije que si tenía que hacer algún trámite lo hiciera y yo lo llamaría cuando estuviéramos listos. No sé cuántas vueltas se dio este pobre hombre, porque el doctor llegó casi una hora después de esta llamada.


Finalmente, pudimos hacer contacto visual y acomodamos a mi adolorido tesoro en el asiento del copiloto, adaptado especialmente para que fuera casi acostado. Instalamos todos los bultos que teníamos, me subí yo atrás y luego él se sentó al volante, con la cara llena de risa y nos consultó para donde emprender el camino. A todo esto, el médico le dio una receta con varios medicamentos que comprar, por lo que la primera parada fue en una farmacia, por fortuna cercana a la clínica. Luego de eso debíamos ir a buscar alguna ropa y otras menudencias al departamento que alguna vez compartimos y que está en la punta oeste de la ciudad. Luego de ir a comprar los medicamentos y recoger todo lo que necesitábamos, partimos rumbo al otro extremo de la ciudad donde finalizaba el trayecto.

Fue tan amable y tenía tanta buena voluntad, que en algún momento me sentí avergonzada de abusar tanto de estas actitudes tan loables. El destino era la casa de mi madre, que vive en un cuarto piso, él se encargó de tomar todos los bultos, que no eran poco y ayudar a subir las escaleras, con una paciencia evidiable.


Imagínense, todo esto empezó a las 11:30 de la mañana y finalizó a las 14:30 hrs. y siempre con la mejor disposición, sin ningún rastro de ansiedad o apuro por terminar pronto. Luego de reflexionar sobre todo esto, concluyo que todavía existen personas desinteresadas, con espíritu de servicio y sin esperar recompensa alguna por su gestión.

Lógicamente, llamé de inmediato al jefe de este ángel para dar las mejores referencias, agradecer todas las molestias que se había tomado y dejarlo lo mejor parado posible, para que también recibiera, al menos, un reconocimiento de su jefe.

lunes, 9 de febrero de 2009

La operación

En este momento están operando a mi amorcito de su famosa hernia inguinal, entró a pabellón hace exactamente una hora y ya no me quedan uñas que comerme. No estaba nerviosa, pero cuando lo vi en la camilla, con esa batita que les ponen, se veía tan indefenso que en ese momento pensé que le podía pasar algo, que es tan niño que quizás le duelan todas esas inyecciones que les ponen sin piedad a los pobres pacientes.

Me siento con esperanzas que todo saldrá bien, me hace bien tener mi laptop para poder desahogar todos mi sentimientos en este momento de incertidumbre máxima. Lo bueno es que podré cuidarlo a tiempo completo, pues estoy con permiso médico varios días más, por lo que me dedicaré sólo a mimarlo y a consentirlo...

domingo, 8 de febrero de 2009

Un rinconcito llamado Lliu-Lliu


Nuestro Chile cada día nos sorprende más y más, yo pensaba que conocía toda la región más turística, la Quinta: Viña del Mar y su reloj de flores, Valparaíso patrimonio de la humanidad con sus interminables cerros, Olmué y su festival del huaso, Limache y sus conocidos tomates, Quilpué lugar de tórtolas, etc. Pues bien, el viernes partí con mi amor hacia Quilpué a saludar a su extensa familia, llegando allá no encontramos con una peculiar invitación a un triple cumpleaños, con quedada a dormir en la localidad de Lliu-Lliu. En mi vida había escuchado de aquel lugar y, siendo honesta, no me tincaba mucho. Accedí a participar y amaneciendo el día sábado partimos en tren hacia Limache, llegando a la estación de Limache nos esperaban en un vehículo, no sé cuántos kilómetros anduvimos, hasta llegar a una hermosa parcela, con una pequeña piscina, donde había muchos árboles, plantas, pastito y un hermoso quincho que ya empezaba a hacer su labor con el carbón al rojo vivo.
Debo reconocer que me sorprendió tanta belleza, no imaginé que en un lugar tan campestre existiera una parcela con todas las comodidades que te puedas imaginar: capacidad para 10 o 12 personas, todo ambientado campestre pero con 3 plasmas maravillosos, conectado al satélite, para mi un sueño, porque señal de internet ni de celular existía ni la más mínima. Ver algo de cable me hizo sentir menos angustiada, como buena citadina que soy.
Estuvimos todo el fin de semana allí, eramos cerca de 30 personas, un poco cohibida pero a medida que pasaba el rato se me hacía menos complicado eso de compartir con personas que no conoces mucho o que jamás en tu vida habías visto.
Agradezco la oportunidad de seguir sorprendiéndome con mi país, a mis amigos bloggeros que me comentan siempre o simplemente me leen, les recomiendo echarse una vueltita por estas tierras, que por lo demás el cambio favorece muchísimo.

sábado, 7 de febrero de 2009

Una quimera

En todos los temas de dinero, a veces nos topamos con imprevistos que nos dejan boquiabiertos. Hace algunos años abrí una cuenta corriente en un banco muy prestigioso de Chile, pensando que con mi sueldo, que hasta ese momento me alcanzaba justo para todos mis gastos y que finalmente se ha vuelto una pesadilla, podría hacer y deshacer con mi hermosa chequera. Aparte, la ejecutiva que me atendió, me juró que el dichoso banco no me cobraría ni por mantención, porque entraba en un convenio por trabajar donde trabajo, ni tampoco impuestos ni intereses comunes.

Al pasar del tiempo, me fueron ofrecidos muchos más productos, siempre con la promesa de no cobrarme nada. Como una tonta los acepté uno a uno, encontrándome cada vez que revisaba mi cuenta en internet, con un montón de cobros con unas glosas inentendibles. Primero me dijeron que no pertenecía al tal convenio por un "error administrativo" de ellos, obviamente no se me devolvió ni un sólo peso por este "error". Al pasar del tiempo, cada vez eran más y más los cobros.

Cabe señalar, que en mi vida había tenido un protesto de mis cheques, siempre eran pagados a tiempo, salvo hoy, que después de depositar un monto considerable en la cuenta, me encontré con TRES CHEQUES PROTESTADOS, como nunca había tenido nada que se le pareciera, se me revolvió el estómago. No sé si las personas a las que les pagué con esos cheques se quedaron sin su dinero y tampoco sé cómo entregárselos, si realmente fue así.

Fue un sueño poseer una chequera de un banco tan importante, pero ahora no hallo las horas de poder cerrarla y dejar de regalarles mi dinero, que nunca ha sido mucho, pero con el que me desenvolvía perfectamente, antes de este desbarajuste. He escrito miles de correos para poder solucionar mi desastre financiero, pero no he recibido ninguna respuesta, ni menos una solución.

Finalmente, la quimera de pertenecer este banco, se transformó en una pesadilla peor que la película.

jueves, 5 de febrero de 2009

Concurso El Fuego

Si mal no entendí, para poder participar en este concurso, debo escribir un post relacionado con libro autografiado, El Fuego fue escrito por Katherine Neville y propiciado por http://www.araquebelagua.com/page/3/, que consiste en escribir un post relacionado a éste y nominar 3 blogs más. Por lo leído, ya van 101 personas participando.

Por la lejanía de donde escribo, no manejo el término "meme", pero se me ocurre que debe ser algo así como cuando premiamos a algún blog por su excelencia. Me queda decir, que espero que este concurso sea internacional, pues yo soy de Chile, aunque tengo muchos amigos de España me siguen.

Dice también que debo ser convocada por alguna de las personas que ya están participando, pues entonces diré que http://noelia-ncb.blogspot.com/ lo ha hecho.

Mis nominados son:

Luzjura: http://ypensarquejuliocambiomivida.blogspot.com

Clarita: http://clarita-mivida.blogspot.com/

Mi Ser: http://miserconspira.blogspot.com/

Gracias por la oportunidad de realzar la literatura mundialmente,

Mona

martes, 3 de febrero de 2009

Vacaciones

Esperamos estas fechas todo el año, trabajamos con el ojo puesto en enero o febrero para tomar las benditas vacaciones, merecidas por cierto. Desde el comienzo ya nos estresamos pensando a dónde encaminar nuestros pasos, para alejarnos lo más posible de la ciudad. Primero ponernos de acuerdo sobre el lugar al que queremos ir, unos dirán que lo mejor es la playa, pero otros encontrarán el campo o la cordillera como el óptimo para pasarlas. Luego nos rompemos la cabeza pensando en ir al mejor lugar, gastando lo menos posible, no vaya a ser cosa que a la vuelta nos espere un cerro de cuentas por pagar y que, lógicamente, se nos harán impagables.

Como si eso fuera poco, tenemos que preparar el equipaje, si la familia es muy grande, el bulto será proporcional a ellos, por otro lado si viajamos solos, con una maleta será más que suficiente. No se nos puede olvidar el traje de baño, las toallas, los medicamentos, por si alguno coge algún mal, el repelente, el bloqueador (en estos tiempos de radiación extrema no puede faltar). Te agarras la cabeza a dos manos cuando ves la cantidad de maletas, cajas y demases que tendrás que acomodar en tu auto. Y ruega a todos tus santos que les toque buen clima y nadie te saque en cara que el lugar escogido no fue el apropiado.

Existen estudios que demuestran que los primeros cinco días son para desconectarse de nuestras actividades, los siguientes dos días son para tratar de empezar a disfrutar de ellas, sin embargo con todo el ajetreo que implica coordinar todo para no sufrir algún percance, así es que debemos restar esos dos días, con esto, nos quedan siete días para poder recién empezar a disfrutar, el momento de instalarnos comienza realmente nuestro descanso. Si pedimos 10 días para dejar los otros 5 en reserva para la temporada invernal, nos quedarán sólo 3 días para disfrutar..., pero si pedimos todo el paquete serán 10 días para hacerlo. Si estás en este tramo, déjame decirte que no son 10 días, son sólo 7, pues debes empezar a pensar en la vuelta, ordenar todo, que no se te quede nada, porque con suerte volverás con el mismo equipaje, si sumas los recuerdos o souvenirs que adquiriste en estos días, deberás sentarte en la maleta para que todo pueda caber.

Los siguientes 2 días son para hacerte el ánimo de volver a trabajar, revisar todas las cuentas, recoger los periódicos apilados en la puerta de tu casa, ordenar y lavar cada prenda que usaste. Tratar de no discutir con tu familia, pues los ánimos a estas alturas son peores que con los que te fuiste...

En resumen, necesitaríamos 15 días más para poder resolver todos estos imponderables, hacernos la idea de que se terminaron, para no ser víctimas del "sindrome post-vacaciones" que aqueja a muchos veraneantes.

Buena suerte en tu viaje, que tengas unas lindas vacaciones...

lunes, 2 de febrero de 2009

Cocinando con.... Mona

¿Quieres hacer un pastel e impresionar a tu media naranja? Pues bien, toma lápiz, papel y mucho entusiasmo, la receta es para principiantes y para profesionales también. Manos a la masa...


Ingredientes:
- 2 tazas de harina cernida con precaución, sacándo los grumos del egoísmo
- 1 pan de mantequilla, fíjese que sea descremada de malos pensamientos.
- 2 tazas de azúcar, la más dulce que encuentre, tan dulce como un beso apasionado.
- 3 huevos, utilizará dos claras y una yema, la otra guárdela refrigerada pues es el inicio de la vida.
- 1/2 litro de leche, procurando que no esté cortada por los pensamientos deplorables o malignos.
- 1 cucharadita de ralladura de naranja, cerciórese de que esté muy madura y con olores deliciosos de azahares.

Preparación:
Para comenzar a preparar la mezcla, asegúrese de que su ánimo sea el más cariñoso posible, de lo contrario no subirá como corresponde y toda la preparación se estropeará. Ponga en un bol la yema, junto con el azúcar y la mantequilla, bata hasta formar una pasta homogénea, fíjese que no se hayan hecho grumos indeseables que puedan cambiar su entusiasmo. En otro bol bata las claras a nieve inyectando todo el aire de tranquilidad posible, una vez que esté muy duro el merengue, añada la harina de a poco, nuevamente inyectando la mayor cantidad posible de sueños por realizar. Luego añada la mezcla de mantequilla, huevo y azúcar, batiendo hasta lograr sacar cada pedacito de angustia y pena.

Prepare el molde cubriendo su fondo con un poco de mantequilla, recuerde que debe ser descremada de malos pensamientos, con un poco de harina bien cernida de egoísmos. Caliente el horno el rato suficiente para que se entibien los helados sentimientos.

Una vez lista la mezcla, recuerde que debe estar ni muy dura que impida enterrar el amor en ella, ni muy líquida, que se derrame entre los dedos de la vida.

Lleve a horno previamente calentado, con los quemadores hacia adentro, por 40 minutos, una vez que pase ese tiempo, observe si subió un poco esa decepción, si es así, cambie los quemadores hacia afuera, para que se dore de amor y esperanza, déjelo por otros 10 minutos de alegría.

Saque del horno y envuévalo con un paño de comprensión y déjelo enfriar, pero nunca más allá de las reconciliaciones y los actos de amor. Espolvoree azúcar flor, la más dulce después de los besos o, si prefiere, báñelo con el chocolate más delicioso que pueda encontrar en una caricia.
Sirva una vez frío y compártalo con quien quiera recibir un pedazo de su alma, expresado en un manjar delicioso, que se ofrece a su boca.

domingo, 1 de febrero de 2009

Píldoras para dormir

Se supone que los somníferos tumban, a quien los tome, de bruces en la almohada, prácticamente se toman y es un verdadero mazazo en la cabeza. Sin embargo, hace casi un mes que los tomo y el mazazo me dura sólo 3 horas, a pesar de que me subieron la dosis. Luego de eso, despierto después de las primeras tres horas transpirando y con sed, tomo un vaso de agua, me acuesto y sigo durmiendo... luego a las dos horas nuevamente despierto, por cierto, con bastante menos sueño que la anterior, pasadas dos horas más y, si no he tenido alguna pesadilla que me despierte antes, simplemente abro los ojos y ya no puedo conciliar el sueño.

Lo más terrible es que me levanto a una hora prudente, pero ando somnolienta por varias horas, lo que me impide realizar las labores de la casa, aunque mi doctora me ha dicho que necesito sólo dormir y descansar, con niños es bien difícil de obedecer, sobre todo cuando se tiene a una madre avanzada en años, que no gusta de realizarlas y que se complica al atender niños adecuadamente.

Las ganas que siempre he tenido para funcionar como corresponde, han ido mermando con el correr de los días, ya no me entretienen los hobbies que siempre me han acompañado: leer, escuchar música, salir de compras, etc. Me pregunto: ¿Estaré pasando por otra etapa en mi enfermedad? ¿Se estará acentuando esta enfermedad que me acompaña desde siempre?
Con el paso de los días, muchas veces pienso si tiene sentido estar siguiendo un tratamiento, si es un tema congénito y volveré a caer en un par de años o meses quizás. Lo único que sé con certeza es que sólo quiero dormir y si fuera posible, para siempre.