viernes, 13 de febrero de 2009

Comprensión

Muchas veces nuestro inconsciente nos hace malas jugadas. Pensamos que sí entendemos lo que le pasa al otro, pero muy dentro nuestro sabemos que en realidad lo que nos dice o lo que le sucege no es tan cierto y que hay mucho de manipulación en ese comportamiento. Sobre todo cuando hay alguna enfermedad de por medio.

Las personas, en un principio, actúan con preocupación y desvelo, pero existen algunos males que, en definiva, no se curan con una píldora y con varios días de reposo. Males del estado de ánimo, que según el mal, hacen que a veces nos sintamos muy activos y otros, simplemente, quisiéramos no existir.

Pongamos el ejemplo de una persona operada, los primeros días son horribles, el dolor de la herida hace que la persona esté irritable y quejumbroso, y se entiende por la magnitud de la invasión. Pero en nuestros días, los médicos sugieren que los operados comiencen de inmediato a movilizarse, obviamente con cautela y de a poco. Puede haber fiebre en algunos casos, donde lógicamente, nuestro enfermo estará tumbado en la cama sin querer saber de nada, sin apetito, sin ánimo. Pasados algunos días la fiebre cede y da paso a un mejor estado general, más optimismo, más apetito y más ganas de levantarse, lo que se irá incrementando a medida que vaya pasando el dolor.

En una enfermedad psiquiátrica, no existen motivos ambientales para los cambios en el estado de ánimo, algunos días podemos estar muy alegres, con ganas de hacer muchas cosas, diríamos hiperactivos (en psiquiatría: Hipomanía). En cambio otros, como hoy, en los que no dan ganas de hacer nada, ni siquiera de hablar, de comer, de asearnos. No importa la cantidad de horas en las que estés en ese estado, es la etapa depresiva del mal.
Entiendo que es difícil de llevar y, entiendo que se sienta como manipulación, pero es efectivo, es como si todo lo que te rodea no tuviera sentido, como si la vida misma estuviera castigándote por existir. Para alguien que nunca lo ha vivido, se torna insoportable e inentendible, quisiéran ayudarte pero no existe en el mundo nada que pueda hacerte cambiar ese estado, salvo algunos medicamentos que aporta un poco de cordura.
En este caso, lo único que sirve de veras, es la comprensión, el estar al lado sin decir palabras, acercarte un pañuelo para que no termine empapada la almohada y las sábanas, llevarte un vaso de agua o simplemente acariciarte el cabello. Pésimo es enfadarte o recriminar a esta persona porque no lo tomas en cuenta o porque sienten que no quiren que estés con ellos.
El amor en estos casos es vital, si realmente te quieren sabran guardar silencio cuando sea necesario, darte una palabra de aliento, simplemente estar.

4 comentarios:

Don Pepe dijo...

La entrega total que haces cuando decides compartir tu vida con alguien, también incluye la tolerancia y el respeto, ese que cuando se debe estar ausente, pero siempre atento, no recriminarte y mucho menos enfadarse, ese que simplemente existe ahí pero no esta.

Luzjuria dijo...

No siempre las personas que sentimos mas cercanas responden a estas situaciones como nosotros pensamos que sería lógico. El temor de no saber que hacer nubla la razón y produce una barrera de protección, no hacia la persona que necesita la comprensión, sino para la propia protección. No todos reaccionamos iguales, recuerda eso, tal vez queremos hacerlo pero no podemos ...

Un besote, te quiero mucho

Mi Ser dijo...

A veces es difícil entender esos silencios angustiosos… es difícil comprender que el sentir no sea suficiente para emprender vuelo… es difícil aceptar que aunque Amemos tanto no podemos cambiar la realidad del otro y hacerle florecer esperanzas…. Si bien sólo uno se enferma… los efectos secundarios afectan a todo el entorno…. El entorno que trabaja para adaptarse… el entorno que debe entender una lagrima también como amor… el entorno que tantas veces se vuelve paraíso para abarcar los breves momentos de felicidad de otro…. El entorno que muchas veces se culpa de cosas que no son responsabilidad de nadie….

Es un proceso… es un paso a crecer y aprender a Amar con las dificultades que pone una enfermedad…. Falta Tolerancia… Quizá… Pero se permanece…. Falta Compromiso… Quizá… Pero se Sigue adelante…. Falta Comprensión… Tal Vez… Pero el Amor Sigue Intacto….

No te Canses… y no te ciegues… que el otro lado es difícil…. Pero se Puede… Te lo Aseguro….!...

Fuerza… y Muchos Abrazos Estrellados para Ti.
Mi Ser

decisiones para la vida dijo...

- Mis querid@s amig@s:
Gracias por sacar el velo de mis ojos, cuando a veces sólo nos miramos el ombligo cuesta pensar que la otra parte lucha por entender y se frustra al notar que su actuar no rinde frutos, por lo que seguramente el cambio de actitud se pensaba daría resultado y finalmente, he hundió más de lo que estaba.
Paciencia es lo que más quiero tener en estos tiempos atolondrados.

Besos grandes para los tres.

Mona